El poblado nació aprovechando la cercanía del Noguera Pallaresa y sobrevivió durante años gracias a la ganadería y a los pastos de alta montaña. La existencia del Santuario nos indica la bonanza que vivieron en su día los habitantes de este valle, antiguamente paso obligado para comunicar el valle de Arán con el Pallars. Muchos años después, la carretera del puerto de Bonaigua dejaría esta vía de acceso en el olvido. Finalmente, el pueblo se abandono durante los años sesenta debido a las duras condiciones de vida y el aislamiento al que estaba sometidos sus habitantes. A día de hoy aun se pueden observar los restos de las antiguas edificaciones del pueblo, incluso adivinar el trazado de alguna de sus calles.
El "Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de ultramar", de Pascual Madoz, nos ofrece una descripción de como era el pueblo de Montgarri a mediados del siglo XIX, momento en el que la población se componía de 13 casas, 3 de ellas junto a la iglesia parroquial de Nuestra Señora de Montgarri. El resto de las edificaciones se ubican a unos diez minutos a pie. Por la dureza del terreno, los cultivos se limitaban a prados para alimentar al abundante ganado vacuno que se criaba en aquella zona. La subsistencia se completaba con pesca y caza de perdices, cabras montesas, lobos e incluso osos.
Fuente: Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de España y sus posesiones de ultramar